El próximo jueves 9 de enero marcará el retorno a las aulas para 609 mil 886 estudiantes de educación básica en Hidalgo, tras casi tres semanas de descanso por las festividades decembrinas y de inicio de año. Ni el intenso frío de la temporada ni la inminente llegada de la segunda tormenta invernal detuvieron el regreso a las actividades escolares, conforme al calendario del ciclo 2024-2025.
La Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH) confirmó que no habrá modificaciones en los horarios de entrada, a diferencia de otras entidades del país que han optado por medidas similares debido a las bajas temperaturas. En un comunicado, la dependencia hizo un llamado a padres de familia y estudiantes a tomar precauciones y acudir bien abrigados para mitigar los efectos del clima helado.
La decisión de mantener los horarios escolares sin cambios responde, según Natividad Castrejón, secretario de Educación Pública del estado, a la necesidad de evaluar las condiciones específicas de cada región de Hidalgo. “Cada plantel tiene la facultad de ajustar sus horarios o suspender actividades en caso de frío extremo, dependiendo de las características locales”, declaró el funcionario en una conferencia anterior al inicio de la temporada invernal.
El anuncio no fue recibido sin preocupaciones. La segunda tormenta invernal, pronosticada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para esta semana, traerá temperaturas bajo cero en varias zonas del estado, especialmente en las regiones serranas y de la Huasteca. Sin embargo, la SEPH reiteró que las medidas preventivas, como el uso de ropa térmica y la ingesta de alimentos calientes, son suficientes para enfrentar las inclemencias del clima.
Padres de familia han expresado opiniones divididas respecto a la decisión. Mientras algunos consideran que el regreso a clases en horario normal fomenta la disciplina y la continuidad académica, otros creen que se debería priorizar la salud de los estudiantes, especialmente en comunidades donde las escuelas carecen de infraestructura adecuada para el invierno.
Por su parte, los docentes también se preparan para enfrentar este desafío. En escuelas ubicadas en zonas de mayor altitud, se han implementado estrategias como el cierre de ventanas durante las primeras horas de clase y el establecimiento de actividades al interior para evitar que los alumnos pasen tiempo prolongado al aire libre.
Con el inicio de este nuevo ciclo escolar tras el periodo vacacional, también regresa la dinámica cotidiana para miles de familias. Para muchos, el frío es un obstáculo más a superar en la búsqueda de garantizar una educación de calidad. Sin embargo, no cabe duda de que esta situación abre el debate sobre la necesidad de establecer protocolos más claros y uniformes para garantizar el bienestar de los estudiantes en condiciones climáticas adversas.