EL EUCALIPTO (Eucalyptus globulus) UN ARBOL GIGANTE.

Es un árbol robusto de grandes dimensiones que se desarrolla rápidamente, las hojas jóvenes se diferencian fácilmente de las adultas ya que son de color ligeramente azulado y crecen en ramas jóvenes, las adultas son contrario crecen en ramas más viejas son de color verde y tienen forma de espada, las flores son blanquecinas, el fruto es una cápsula conácea que contiene numerosas semillas.
Este árbol posee un olor fuerte y aromático a pesar de ser australiano se ha aclimatado perfectamente a varias regiones del mundo se desarrolla bien en zonas cálidas pero necesita mucha agua para su desarrollo. Las hojas adultas contienen aceite esencial, hasta un 80%, también contienen taninos y resinas. Perteneciente a las familias de las mirtáceas, sus hojas son reconocidas por sus propiedades medicinales, los pueblos aborígenes solían utilizarlo como un remedio para combatir la fiebre, enfermedades respiratorias y otros males.
Las hojas de eucalipto tienen propiedades antisépticas, el uso tópico del eucalipto es muy eficaz para combatir afecciones de la piel, como aftas, herpes bucales, heridas leves de acné o barritos, su riqueza en ácido gálico le otorga eficaces propiedades astringentes que ayudan a tratar problemas comunes de la piel.
Propiedades estimulantes: las hojas del eucalipto desprenden un aroma confortante que invita a la relajación, además estimula los sentidos y alivia la mente. Por lo tanto, es muy recomendable en vaporizaciones.
Propiedades: Expectorante: Tome 3 hojas de eucalipto, en 250 ml de agua, ya que contribuyen a reducir la formación de mucosidad en los bronquios, también combate la tos y estados febriles. Si se combina con flor de sauco, gordolobo, bugambilia, tejocote y guaje cirial, es más eficaz.
Vaporizaciones: Coloca 3 litros de agua caliente en un recipiente y coloca 40 gotas de aceite esencial de eucalipto, (colocas la cabeza por encima aprox. 40 cm de distancia y cubres tu cabeza con una sábana o toalla, a la vez que inhalas los vapores medicinales. Será de gran ayudad ya que alivia las infecciones de la garganta y la laringe. Si no tienes el aceite te sirven las hojas.
El uso externo del eucalipto ayuda a que las heridas y los eccemas cicatricen, mejorando el aspecto de la piel. Pude ser utilizado como cataplasma (pon a hervir 30 hojas frescas en un litro de agua. Una vez frio impregna una toalla y colócala en el área donde deseas disminuir el daño por cicatrices o secuelas en la piel.
Tiene también función anti-diabetes: una infusión de hojas de eucalipto ayuda a reducir los niveles de azúcar en la sangre, se recomienda únicamente una taza al día.
Propiedades antiparasitarias: la decocción de las hojas nos ayuda para expulsar parásitos intestinales.
Efecto antibacterial: Tomar una infusión nos ayuda para combatir infecciones causadas por acumulación de agentes patógenos en las vías urinarias.
Propiedades analgésicas: para aliviar afecciones musculares es útil mezclar 21 gotas de aceite esencial de eucalipto y 21 gotas de aceite esencial de romero en 50 ml de aceite de sésamo o almendras dulces y usarlo de forma externa, masajeando la parte adolorida o golpeada 3 veces al día. Está misma fórmula te será de gran utilidad en problemas respiratorios, colocado en área de espalda, pecho y cuello.
Se pueden emplear tanto las hojas secas como las hojas frescas, además podemos elaborar jarabes o tinturas útiles para tratar el aparato respiratorio en cualquier momento.
Se recomienda la aromaterapia con eucalipto ya que estimula el sistema nervioso lo que lo hace muy útil para combatir emociones negativas como síndrome premenstrual o menopausia.
Si tienes un cabello quebradizo y débil coloca 7 gotas de aceite esencial de eucalipto en 10 gotas de aceite base de argan o Jojoba mézclalas y colocas directamente en tu cabello una vez a la semana.
Es esta una pequeña parte de los grandes beneficios que puedes obtener del eucalipto árbol aromático un gran aliado para nuestra salud.
Por Dra. Graciela Moran Villafuerte
BIBLIOGRAFIA: La farmacia en casa. Lexus. Pag. 93
Hierbas y plantas curativas. Diana Pag. 65.