Como mexicanos hablar del mes de noviembre, es hablar del Día de Muertos. El tan esperado retorno de las almas de los fieles difuntos, que regresan del más allá para disfrutar las delicias terrenales que gustaban cuando estaban vivos.
Las casas se llenan de ricos aromas, colores y sabores que vienen de platillos espléndidos realizados con amor y dedicación, el olor de pan recién horneado impregna las calles de los pueblos, el sabor del chocolate calientito y muchas frutas y dulces nos avisan que el gran día inmortalizado de manera majestuosa en la película Coco ha llegado después de un año de espera, vivos y muertos compartimos las exquisiteces culinarias familiares.


En un lugar estratégico de la casa se coloca el tan colorido altar, para que las personas que han fallecido regresen a consumirlos según la tradición, posteriormente estos alimentos se comparten con amigos, vecinos y familiares mismos que afirman que han perdido la esencia. Ya que los difuntos habrían consumido el sabor. Estos bellos altares son adornados con hermosas flores amarillas conocidas como cempasúchil o flor de muerto. Y es de sus propiedades medicinales de esta aromática flor de la que hoy te quiero platicar.


Dentro de sus componentes químicos, se han identificado monoterpenos, geraniol, limoneno, linalol y mentol. Y las hojas tienen un aceite esencial. Las flores y pétalos son ricos en carotenoides entre ellos la luteína y la xantofila.

Evaluaciones farmacológicas: Presenta actividad antibiótica contra Pseudomona aeruginosa, (aquí el porqué de su eficacia en enfermedades de pulmón y riñón) Staphylococcus aureus, (útil en enfermedades de la piel) Bacilus cereus (intoxicación intestinal y alimentaria) y Escherichia coli ( para infecciones gastrointestinales)
Es antimicótico, contra Candida albicans, (para infecciones gastrointestinales y genitales) Aspergillus niger y Trichoderma viride (funcional como insecticida de las plantas de manera natural).

Te comparto algunas de sus tantas propiedades medicinales, es un gran parasitario, por lo tanto si lo usamos en decocción nos ayuda para eliminar parásitos intestinales, inflamaciones del colón, divertículos, sirve muy bien para la ventosidad infantil.


Forma de uso: pon a hervir 1 L de agua, posteriormente colocale de 10 a 15 gramos de pétalos de flores de cempazuxhil y deja que hierva por dos minutos. Toma una taza cada 4 horas (sin endulzar) por un periodo no mayor a 21 días, posteriormente descansamos 8 días y podemos volver a empezar dependiendo de la necesidad del organismo. El consumo oral debe ser únicamente mediante cocimiento para no irritar la mucosa intestinal. Una infusión de pétalos de cempazuchil le será de mucha utilidad en problemas hepáticos, se ha reconocido la eficacia de la flor de los mil pétalos para limpiar hígado y vesícula, así mismo en afecciones del estómago, grasa visceral acumulada, empacho, diarrea y vómito.


Es un gran tónico para el sistema nervioso; se recomienda especialmente en atole, para ayudar a las mujeres recién paridas a producir más leche materna. Si hacemos una maceración con 500 ml de aceite de sésamo, le agregamos pétalos de 12 flores medianas de cempasúchil y lo dejamos en un lugar fresco seco y oscuro. Lo agitamos todos los días por 10 minutos, por 21 días. Al día 22 se filtra. El aceite resultante se utiliza para problemas de reumatismo, gota y ácido úrico, así como en malestares musculares. A nivel mágico-espiritual es una flor usada para atenuar los malestares en enfermos terminales de cáncer ya que el aroma los hace estar en paz y aceptando el inminente desenlace. Por esto y más no tires tus flores utilizadas en las ofrendas de día de los muertos.


Vive mejor con la flor de muerto.
Espero tus dudas y comentarios.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *