La telesecundaria 103 de la comunidad de Macuxtepetla, en Huejutla, Hidalgo, se encuentra inmersa en un conflicto que ha paralizado tanto sus actividades académicas como el tránsito en una de las principales carreteras de la región. Padres de familia, cansados de esperar durante dos años una solución por parte de las autoridades educativas, cerraron la carretera Huejutla-San Felipe en protesta por la falta de un intendente en la institución. El problema radica en la ausencia de un intendente que realice las tareas de limpieza en la escuela.

Ante esta situación, han sido principalmente las madres de familia quienes, de manera voluntaria, han asumido estas responsabilidades, lo que ha generado inconformidad y desgaste. Desde hace dos años, la comunidad escolar ha enviado solicitudes a la supervisión educativa, pero hasta ahora no han obtenido una respuesta concreta. El bloqueo de la carretera, que es uno de los principales accesos a la cabecera municipal de Huejutla, generó tensiones entre los habitantes de la región, ya que afectó la movilidad de vehículos particulares y de transporte público. Sin embargo, tras un diálogo con autoridades educativas, los manifestantes decidieron dar una prórroga de tres días para que se resuelva el problema.

En asamblea, los tutores acordaron que, mientras esperan una solución, la telesecundaria permanecerá cerrada como medida de presión. Además, se instalaron guardias en los accesos de la institución para impedir el ingreso de personal administrativo, directivos o docentes, hasta que se confirme la contratación del nuevo intendente.

Cartulinas con mensajes como «Exigimos intendente ya» y «Dos años de espera, es suficiente» adornan los accesos principales de la escuela, reflejando la desesperación y el hartazgo de la comunidad. Los padres de familia aseguraron que, si en el plazo acordado no se da una solución definitiva, volverán a bloquear la carretera como una medida más severa para ser escuchados.

La falta de atención por parte de las autoridades educativas no solo ha afectado las condiciones de la escuela, sino también la dinámica diaria de los padres y alumnos.

«Es indignante que tengamos que llegar a este punto por algo tan básico como un intendente. No pedimos lujos, pedimos condiciones dignas para nuestros hijos»,

comentó una madre de familia que ha participado activamente en las protestas.

La telesecundaria 103 de Huejutla se ha convertido en un ejemplo de cómo la falta de atención a necesidades básicas puede desencadenar conflictos mayores. Los padres exigen que las autoridades escolares cumplan con su responsabilidad y no alarguen más esta situación, que afecta tanto la educación de los alumnos como el bienestar de la comunidad.

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