Ejidatarios de Hidalgo protestan en Conagua
La mañana de este lunes, integrantes del ejido de Tepatepec, del municipio Francisco I. Madero, Hidalgo, se manifestaron en la Ciudad de México frente a las instalaciones de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), bloqueando la avenida Insurgentes en dirección al centro de la capital. Su demanda principal: exigir la desaparición de los tres Módulos de Riego que, aseguran, los despojan del agua necesaria para irrigar sus tierras del Distrito de Riego 003 Tula.
La protesta fue protagonizada principalmente por campesinos, muchos de ellos adultos mayores, que viajaron desde Hidalgo para exigir que la distribución del agua vuelva a estar bajo control directo de Conagua y no de gestores privados, a quienes acusan de corrupción y de beneficiar a una minoría. Según Israel Hernández, representante del ejido, actualmente sólo se reparten 94 millones de metros cúbicos de agua, cantidad que consideran insuficiente para abastecer las más de 54 mil hectáreas destinadas a cultivos como maíz, frijol y alfalfa.
Los inconformes denunciaron que con la infraestructura actual apenas 75 personas están recibiendo beneficios hídricos, cuando originalmente el sistema fue diseñado para favorecer a más de 5 mil agricultores. Esta situación, aseguran, pone en riesgo no solo sus cosechas, sino también su subsistencia, al depender económicamente de la producción agrícola que ahora está en franco deterioro.
Durante la manifestación, los ejidatarios impidieron el acceso y salida del personal de la Conagua, colgando mantas de protesta en la fachada principal del edificio, en las que exigían el retiro inmediato de los módulos y una solución urgente a su problemática. En su clamor, insistieron en que la autoridad competente para resolver el conflicto es la propia Comisión Nacional del Agua, y no la Secretaría de Gobernación, donde señalaron que se quiso desviar su caso.
La protesta, inicialmente pacífica, se tornó tensa cuando un contingente de policías acudió al lugar para liberar la vialidad. Los uniformados encapsularon a los manifestantes utilizando escudos plásticos y emplearon la fuerza para replegarlos, lo que derivó en momentos de confrontación. Tres mujeres resultaron heridas durante los empujones, sin que fueran trasladadas a centros médicos; únicamente recibieron atención superficial de parte del personal de la Conagua.
La situación parecía intensificarse cuando un grupo de jóvenes, que se identificaron como estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se acercó para brindar su apoyo a los ejidatarios. Este acto de solidaridad motivó a los elementos policiacos a retirarse del lugar poco después, dejando atrás un ambiente de inconformidad, desconfianza y dolor entre los manifestantes.
La protesta dejó al descubierto la profunda crisis de distribución del agua en las zonas agrícolas de Hidalgo, un problema que, aunque tiene años gestándose, parece agravarse con el control privado de los recursos hídricos. Para los ejidatarios de Tepatepec, esta lucha es por su tierra, su agua y su derecho a una vida digna.