Pachuca, Hgo., 20 de mayo de 2025

El estado de Hidalgo se encuentra bajo alerta preventiva este martes 20 de mayo, debido a condiciones meteorológicas extremas que podrían poner en riesgo a la población. Así lo dio a conocer la Subsecretaría de Protección Civil, quien advirtió sobre la llegada de lluvias intensas, vientos fuertes y temperaturas que en algunas zonas podrían rozar los 45 grados Celsius.

Según el reporte oficial, se espera una acumulación de entre 50 y 75 milímetros de precipitación, considerada como muy fuerte en términos climatológicos. Las temperaturas más extremas se registrarán en el norte del estado, donde se pronostican máximas de hasta 45 °C, lo cual representa un riesgo elevado para la salud, especialmente entre menores, personas adultas mayores y con enfermedades crónicas.

A esto se suma la presencia de rachas de viento que podrían alcanzar entre 40 y 60 kilómetros por hora, principalmente en las zonas este y noreste de la entidad. Esta combinación de factores —viento, lluvia intensa y calor extremo— incrementa el peligro de accidentes, afectaciones en infraestructura y cortes en el suministro de servicios básicos, como luz y agua potable.

Ante este panorama, la Subsecretaría de Protección Civil ha emitido una serie de recomendaciones específicas para la población, con el fin de prevenir incidentes mayores:

  • Asegurar techos, láminas, lonas y objetos que puedan ser levantados o arrastrados por el viento.
  • Evitar guarecerse bajo árboles o estructuras metálicas durante las tormentas.
  • Conducir con extrema precaución, especialmente en zonas carreteras donde las tolvaneras pueden reducir la visibilidad.
  • Estar atentos a los canales oficiales de información y evitar la propagación de rumores que puedan generar confusión.
  • Reportar cualquier daño estructural o situación de emergencia directamente al número 911.

Las autoridades estatales confirmaron que se encuentran en coordinación con los 84 municipios de Hidalgo para implementar medidas de respuesta inmediata en caso de que se presenten emergencias. Se mantendrá monitoreo constante del clima, así como vigilancia en las zonas vulnerables a deslaves, inundaciones y caída de árboles.

Esta situación climática no solo representa un reto logístico para los servicios de emergencia, sino también una llamada de atención sobre los cambios en los patrones meteorológicos que han afectado con mayor intensidad a la región en los últimos años.

Protección Civil ha reiterado que actuar con rapidez y responsabilidad puede marcar la diferencia entre la seguridad y el riesgo. Por ello, el llamado a la población es claro: mantenerse informados, seguir las recomendaciones oficiales y priorizar la seguridad de todas las personas del hogar.

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