El gobierno federal anunció una serie de medidas arancelarias dirigidas a proteger la industria textil mexicana, una de las más importantes en el país y que actualmente enfrenta diversos retos que afectan su competitividad y empleo. Durante la conferencia matutina de este jueves 19 de diciembre, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, destacó que Hidalgo ocupa el tercer lugar nacional en producción textil y subrayó la necesidad de estas estrategias para evitar abusos y salvaguardar los 400 mil empleos que genera este sector.
Entre las medidas más relevantes se encuentra el incremento temporal de aranceles al 35% para mercancías confeccionadas y al 15% para la importación de productos textiles, con excepción de aquellos provenientes de países con tratados de libre comercio. Además, se ampliará la lista de productos cuya importación está prohibida bajo el Programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX), vigentes hasta el 22 de abril de 2026, tras su publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
La industria textil mexicana enfrenta prácticas desleales, como la venta de productos textiles no terminados como si fueran productos acabados. Este tipo de abusos ha llevado a que el Producto Interno Bruto (PIB) del sector disminuya a una tasa anual del 4.8%. En términos económicos, esto representa una pérdida aproximada de mil 229 millones de pesos y la desaparición de 79 mil empleos en estados clave como Estado de México, Puebla, Hidalgo, Coahuila y Guanajuato.
Desde 2019, el sector ha importado más de lo que exporta. Las importaciones textiles han crecido un 0.8%, mientras que las de productos confeccionados aumentaron un 12.5%. Además, una proporción considerable de empresas del programa IMMEX no han cumplido con el requisito de devolver el 80% de las mercancías importadas temporalmente, generando desbalances en el mercado.
Las nuevas estrategias buscan fomentar el desarrollo de la industria textil nacional y generar condiciones justas de mercado. Entre los objetivos clave están:
- Combatir el contrabando técnico.
- Proteger los empleos existentes y promover nuevos puestos de trabajo.
- Mejorar la competitividad del sector.
- Incentivar el comercio con mercados que tienen tratados comerciales con México.
El secretario Ebrard enfatizó que estas acciones no solo beneficiarán a las grandes empresas, sino también a las comunidades que dependen de esta industria para su desarrollo económico.
Hidalgo, reconocido como el tercer estado con mayor producción textil a nivel nacional, se perfila como uno de los mayores beneficiados de estas medidas. Las autoridades locales también podrían colaborar con el sector privado para capitalizar estas nuevas condiciones y posicionarse como un líder en el mercado textil.
Con la implementación de estas medidas, el gobierno federal busca dar un respiro a la industria y garantizar su sostenibilidad a largo plazo, favoreciendo tanto la economía como el empleo en el país.