Desde tempranas horas de este miércoles, la autopista México-Pachuca se convirtió en un foco de protesta y tensión, luego de que transportistas decidieran bloquear diversos puntos de esta importante vía, afectando a miles de ciudadanos que se dirigían a la Ciudad de México (CDMX). La manifestación, que busca exigir justicia por un presunto caso de violación en Hidalgo, ha generado caos vehicular y desesperación entre los automovilistas.Los transportistas han desplegado lonas y carteles en los que piden un seguimiento puntual al caso de Williams “N”, ligado al partido Morena, quien es señalado como presunto responsable de un delito de abuso sexual en el municipio de Zimapán, Hidalgo. Los manifestantes insisten en que las autoridades atiendan con celeridad el caso y garanticen justicia para la víctima.Fue alrededor de las 04:00 horas cuando Caminos y Puentes Federales (Capufe) informó sobre el cierre parcial de la autopista en el kilómetro 32, con dirección a la CDMX, debido a la presencia de manifestantes en la Plaza de Cobro Chalco. Se estima que el bloqueo total de la vialidad se lleve a cabo a partir de las 07:00 horas, lo que incrementará aún más el tráfico y la molestia entre los viajeros.Además, usuarios de redes sociales han reportado que el bloqueo se ha extendido hasta la caseta de cobro de San Cristóbal, en Ecatepec de Morelos, generando un colapso vehicular en una de las rutas más transitadas entre Hidalgo y la capital del país. Videos compartidos en distintas plataformas muestran cómo cientos de automovilistas intentan avanzar sin éxito, mientras la tensión aumenta ante la falta de alternativas viables para evitar la congestión.Los afectados han expresado su frustración por la situación, señalando que la falta de información y la ausencia de rutas alternas han complicado aún más la movilidad en la zona. Mientras tanto, los transportistas han reiterado su postura de no levantar los bloqueos hasta recibir respuesta de las autoridades correspondientes.Este tipo de manifestaciones han sido recurrentes en los últimos meses, convirtiéndose en un mecanismo de presión para exigir respuestas ante casos de impunidad y violencia. La incertidumbre sobre cuánto tiempo durará el bloqueo y si se intensificará en otros puntos mantiene en vilo a los ciudadanos que dependen de esta vía para sus actividades diarias.