Tlaxcoapan, Hidalgo, 21 de mayo de 2025

La mañana de este miércoles se tornó tensa en la comunidad de Teltipán de Juárez, municipio de Tlaxcoapan, luego de que un grupo de padres de familia cerrara de manera indefinida la Escuela Primaria Leona Vicario. La acción fue emprendida en protesta por presuntas irregularidades financieras cometidas por el Comité de Padres de Familia y la supuesta complicidad del director del plantel, Freddy Jiménez Martínez.

Los manifestantes acusan un faltante económico que podría ascender a los 200 mil pesos, según revelaron tras una auditoría realizada por iniciativa propia. El conflicto surgió a raíz de la entrega de un corte de caja por parte del comité escolar, el cual fue recibido con escepticismo por parte de los padres, quienes decidieron revisar los libros contables ante la falta de claridad.

Durante la revisión, aseguran haber encontrado anomalías en las notas de gastos, inconsistencias entre las facturas presentadas y los egresos registrados, así como documentos aparentemente alterados. Estos hallazgos avivaron el descontento de la comunidad escolar, que ahora exige dos acciones concretas: la devolución del dinero presuntamente desviado y la destitución inmediata del director.

Freddy Jiménez Martínez ha sido señalado por los inconformes como presunto encubridor de las irregularidades financieras. Consideran que su permanencia en el cargo es insostenible, ya que aseguran que tuvo conocimiento de las irregularidades y no actuó en consecuencia, lo que, según los padres, lo convierte en cómplice del presunto mal manejo de los recursos escolares.

El plantel permanece cerrado desde primeras horas del día, cuando los padres bloquearon el acceso principal como forma de presión. Anunciaron que no reabrirán la institución hasta recibir una respuesta clara y acciones concretas por parte de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), a quien han solicitado intervenir de forma urgente para atender sus demandas.

La molestia entre la comunidad educativa ha escalado a tal punto que no descartan emprender acciones legales o manifestaciones más grandes si las autoridades educativas no responden con celeridad. De momento, no se ha emitido un posicionamiento oficial por parte de la SEPH ni del director de la escuela.

El caso ha generado preocupación entre los vecinos de la localidad, quienes ven con inquietud cómo los conflictos administrativos pueden impactar directamente en la educación de los menores, ya que las clases han sido suspendidas mientras se resuelve el conflicto.

Este hecho pone nuevamente sobre la mesa la urgencia de transparentar el manejo de los recursos escolares en las instituciones públicas y establecer mecanismos de fiscalización eficaces que eviten estos escenarios. En tanto, los padres reiteran que su lucha no es política ni personal, sino por el bien de sus hijos y la rendición de cuentas.

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