¿Por qué es más fácil aprender inglés si hablas ñhañhu?
En el amplio universo de las lenguas, cada idioma guarda secretos que lo hacen único, pero también sorprende descubrir puentes que conectan culturas tan distintas como la lengua ñhañhu (otomí) y el inglés. Aunque a primera vista parecen mundos opuestos —una lengua indígena de raíces mesoamericanas frente a una lengua germánica globalizada—, existen similitudes que pueden convertir al ñhañhu en una excelente base para aprender inglés.
Sonidos que se aproximan
El inglés contiene sonidos aspirados y combinaciones vocálicas que pueden resultar complicados para hablantes de español, pero no tanto para quienes hablan ñhañhu. El sistema fonético del ñhañhu, con consonantes como h, k, t, o x y vocales fuertes y cortas, entrena al oído para diferenciar y reproducir fonemas que en inglés son esenciales.
Una mente bilingüe y flexible
Quienes hablan ñhañhu ya cuentan con una ventaja natural: su mente ha aprendido a moverse entre dos sistemas lingüísticos (ñhañhu y español). Este bilingüismo les permite tener una mayor flexibilidad para comprender y adoptar nuevas estructuras, algo crucial al enfrentarse al inglés.
Conexión cultural y orgullo lingüístico
Hablar ñhañhu no solo facilita aprender otro idioma, sino que también fortalece la identidad. Entender que el inglés no es una amenaza, sino una herramienta más para comunicarse con el mundo, abre una puerta de doble vía: mientras aprenden inglés, los hablantes de ñhañhu pueden mostrar al mundo la riqueza de su lengua originaria.
En conclusión, el ñhañhu y el inglés no son tan distintos como parecen. Ambos comparten una simplicidad estructural que, sumada a la experiencia bilingüe de sus hablantes, hace que aprender inglés sea un proceso más natural. Cada nuevo idioma que aprendemos no borra el anterior, al contrario: fortalece nuestra capacidad de entender el mundo desde diferentes perspectivas.
Por: Dra. Ana Karen de Anda